miércoles, marzo 26, 2014

Momentos para recordar

Y un solo elemento fuera de lugar causo que enfilara mis pasos hacia ti, aunque en realidad a ti no te buscaba... y tal parece que no había visto antes la luz hasta encontrarla en tu mirada, hasta encontrar en un tartamudeo inusual, en un temblor nervioso de mis manos, la manera de sostenerte la mirada y acordarme de cómo hablar...

De esos momentos que busco grabar como con un hierro al rojo en mi mente,  esa cadencia de tus hombros al hablar, tus dulces labios rosas matizando tu dulce voz, esa pulsera con los colores de la bandera francesa enmarcando el tatuaje de estrellas que decoraba tu brazo, tu delicada piel que en mis sueños eternos tocaría sin descanso... ese rostro de ángel con tus rizos castaños decorándolo dulcemente... tan dulce como el recuerdo que ha quedado en mí...

En la distancia entre el 11 y el 10, en solo unos minutos que cambiaste mi manera de ver la vida, de azul mate al naranja brillante de tu playera... en una locura de nombre ininteligible porque aunque recuerdo el tuyo no lo nombraría hasta tenerlo de tu boca, hasta el día que el sueño te robe el aliento como tú con tu bella sonrisa robaste el mío...

Vuelvo a la realidad, ahora un poco más dulce al saber que existes, que aunque un poco lejos, estas más cerca de lo que nunca hubiera imaginado, dilapidando sueños como efímeras flores y te escribo mil versos en el viento a mi alrededor, escribiendo mails a la Hermosa Dama solo por ti... infinito absurdo maravilloso y terrible que cierro en estas líneas ahora antes de creer que es algo más que un momento para recordar.

jueves, marzo 20, 2014

Nada personal...

“No, te juro que no eres tú... sólo recibí una mejor oferta”... y seamos honestos cuantas veces hemos cambiado algo por otra cosa mejor, y es lo más lógico que existe, pero por alguna extraña razón quienes más lo hacen son los más criticados... existe una bizarra actitud de querer permanecer tal cual se está y quienes logran superar su status quo son objeto de recriminaciones, miradas hostiles y otras cosas que se supone son absurdas si en una situación similar haríamos lo mismo... no es nada personal, muchas veces se dice que nosotros somos el producto de nuestra propia empresa (nosotros mismos), que hay de malo en una mejor producción y un cambio de accesorios, sino de ubicación y hasta de compañeros de vida... y entonces no nos damos el espacio para detenernos a hacer una evaluación crítica de lo que se puede mejorar, aunque haya que sacrificar aquello que nos “gusta” o “queremos”, simplemente es un buen ejercicio, puede ser hasta un buen negocio... de verdad sin rencores, no es nada personal...

miércoles, marzo 19, 2014

Nada Despreciable

Definitivamente hay cosas que parecen que tardan en llegar, oportunidades que se presentan de la nada y una bella rueda de la fortuna que simboliza todo lo alto y todo lo bajo que se puede llegar a estar... y piensas en lo nada despreciable de ciertas tentaciones, de aquello que por donde lo veas se ve muy bien... no podemos negar que la ambición permea nuestras vidas, que muchas veces no importa tanto lo que llegamos a romper si espera algo más prometedor, que sin ser oro tiene un brillo bastante peculiar... y deconstruyes todo a tu alrededor para que se vea nuevo y hasta combinas tu guardarropa para que se vea de estreno, para que al mirar por esa nueva ventana logres hacer ‘fit’ con la gran vista que se tiene... porque quieres mas aunque no sepas para que, por vanidad simple o compleja, casi sin querer... pero hay cosas que siempre serán como son, aguarda por más que el cambio las sacuda, espera porque en el momento menos esperado llegará algo que no podrás despreciar...

De caminos sin retorno aparente...

Y de pronto te encuentras aquí entre cuatro paredes hasta ayer desconocidas intentando encontrar las razones que te trajeron, intentando entender que el cambio, por fuerza, debe ser bueno... dilapidando el tiempo en un lapsus “normal” por ser ‘nuevo’ y no tanto, igual pero ‘diferente’... porque siempre hay un anhelo de mas, de otras cosas y al mismo tiempo de aferrarse a aquello que ya es, o fue, cuando muchas veces emprender el camino de ida ya no permite regresar... porque el seguir avanzando es un vicio voraz, aunque siempre busques la estabilidad... y de pronto tan cerca en el lugar, tan lejos en el tiempo, recordando tus miradas, tus afrentas, como le reclamabas a la vida lo que creías tuyo y al final también dejaste ir... sin vuelta atrás solo déjate guiar por el tiempo, porque hasta el camino solo de ida, regresa al mismo lugar...