jueves, septiembre 30, 2021

¿En dónde te detienes?

El tener buenos hábitos es la base de lograr resultados extraordinarios en la vida y uno de ellos que es mi mantra de vida es "yo aprendo algo nuevo todo los días" y una forma fácil que he encontrado para que esto suceda es estar presente en nuestro Klub de Lectura y de esa forma iniciar el día con conocimiento fresco e información de valor.

Hoy en la lectura se destacó un aspecto sumamente importante acerca de como multiplicar resultados, la mayoría de las personas se conforman con hacer lo mínimo indispensable o hasta donde tienen su "máximo", sin embargo, el multiplicar resultados depende de hacer ese extra, aquello que ya no se requiere de ti, ese adicional que está más allá de tu máximo, el no detenerte sino continuar un poco más.

Puedo recordar varios momentos de mi vida donde no me sentí capaz de hacer algo, donde sabía que había un límite y aún así lo pude hacer y sobrepase ese límite. Uno de ellos fue cuando hice un viaje algo mal planeado y estuve 5 días tomando muy poca agua, prácticamente comiendo comida de avión y rápida, con muy pocas horas de sueño y aún así rendir todo un día de trabajo completo, después de 14 horas en tránsito, como cualquier otro.

Y hace unos días que en un simulacro de evacuación después de un sismo, bajar por las escaleras 42 pisos, algo que retaba los límites de mi imaginación que en varios puntos (por ahí del piso 30, 20, 10) pensé que ya no podía más lo logré, no me detuve y conseguí mi objetivo.

Siempre podemos dar ese extra, ese paso adicional, decidir no detenernos, ir por la siguiente llamada, la siguiente lección de un curso, una presentación más de negocios, 100 metros más cuando ya nos flaquean las piernas, eso es lo que nos hará extraordinarios, siempre ir un paso al frente de la mayoría. ¿Tú te atreves a ir más allá o simplemente te detienes?

martes, septiembre 28, 2021

El proceso científico aplicado

Ante todo soy un hombre de ciencia, y todo empezó porque mi mamá quería estudiar Química, aunque claro eso me lo dijo ya casi cuando yo estaba por terminar mi carrera en Ingeniería Química, sin embargo, desde niño lo que más quería era un juego de química (si ya sé que soy el más ñoño entre los ñoños).

En fin siempre me gustó leer sobre ciencia, artículos de ciencias naturales, sobre cosas que explicaran como funciona el mundo y lo que vemos. Por eso tenía tanta prisa antes de que aprendiera a leer a hacerlo lo más rápido posible.

He dedicado muchas horas de mi vida a estudiar, observar, entender como funcionan las cosas, desde lo más básico hasta lo más complejo que he podido conocer y he visto un patrón sumamente interesante en este proceso. Los científicos observan un fenómeno, establecen una hipótesis de que produce ese fenómeno y después experimentan, investigan, reproducen las condiciones hasta obtener o no ese fenómeno y de esa manera establecer una Ley que explica y nos da cierto poder sobre ese fenómeno.

Lo genial de esto es que puede aplicarse a cualquier cosa que vemos, como el dinero (que es uno de mis temas favoritos) si se quiere más dinero, hay que observar el fenómeno, establecer hipótesis, experimentar e investigar y ver que Leyes gobiernan el dinero y listo, reproducirlo, reproducirlo y reproducirlo.

¿Qué de la vida te gustaría dominar? Cualquier cosa, los negocios, las relaciones, las ciencias exactas o las ciencias sociales son susceptibles de aplicarles el proceso que los científicos han usado. Lo interesante es que ya muchas de las cosas conocidas ya tienen sus Leyes y solo basta conocerlas para poder lograr grandes resultados, la pregunta es: ¿Estás dispuesto a invertir el esfuerzo y el tiempo para conocer aquello?

jueves, septiembre 23, 2021

Am I Wlling?

La pregunta es: ¿Qué realmente puedo lograr? A lo que uno de mis grandes mentores responde: "Todo lo que quieras lograr es posible." Sin embargo, ¿Por qué la mayoría no logra grandes objetivos, o alcanza un nivel superior de éxito?

Continuaba la disertación acerca de como lograr grandes objetivos y realmente el problema no es no querer o ambicionar grandes cosas, y ni siquiera digamos grandes cosas sino cosas que a todos nos despiertan deseos, como tener una cuenta en el banco que parezca número telefónico (como con 10 cifras), tener los abdominales bien marcados, lograr una posición directiva en nuestro trabajo, una casa a nuestro total gusto (y que no la debamos), entre muchas otras cosas que nos gustaría mucho tener.

El querer ya está, la brecha entre el querer y tener explica mi mentor es: LA VOLUNTAD (en inglés WILL). Por eso la pregunta que inicia este post, ¿Tengo la voluntad? (me agrada más la connotación en inglés).

¿La voluntad de que? La voluntad de pagar el precio por lo que realmente quiero. Y es que el verdadero quid de la cuestión no es que haya cosas inalcanzables (en el momento que un ser humano alcanza algo esta a disposición de la entera especie humana) sino que no estamos dispuestos a recorrer el camino hasta lograrlo. Un ejemplo clásico de esto es escalar la cima más alta del mundo en el monte Everest, muchos la han escalado, o sea es posible, sin embargo, el precio de hacerlo es tan grande que la gran mayoría ni siquiera está dispuesta a imaginarlo.

Por lo tanto tener la voluntad de pagar el precio por lo que realmente queremos es lo que nos separa de ello. Así que la próxima vez que desees algo, para que no te atormente toda la vida, solo pregúntate ¿Estoy dispuesto a pagar el precio por obtenerlo? 

miércoles, septiembre 22, 2021

Buscando el incentivo

Hace tiempo uno de mis amigos que se dedica a la educación disruptiva me preguntó porque los alumnos tendían (en México principalmente) a hacer trampa en los exámenes, en sobornar a los maestros para pasar y otras prácticas éticamente reprobables en una persona que se supone estudia para superarse en la vida.

Me hizo recordar que escribí un ensayo justo de ese tema, donde la premisa central era que el incentivo para copiar, hacer trampas o sobornar era mucho mayor al incentivo por aprender y sacar provecho por cursar la materia. ¿Qué es lo más probable que haga un joven? Las alternativas son esforzarse arduamente y pasar o no limpiamente, en caso de que no pasara la burla de los compañeros, regaños de los padres, humillación de los profesores o saltarse las reglas (en la cultura de "El que no tranza no avanza") ser elogiado por sus pares, tener contentos a sus padres y que el profesor no moleste.

Ante ambas opciones el ser humano tiende a tomar la que le provoque mayores ganancias a menores costos, es decir a donde el INCENTIVO sea más poderoso es donde más probablemente se inclinará la decisión.

Cuando analizamos los comportamientos, idealmente los propios, aunque hay más incentivo de analizar el de los demás, podemos comenzar a predecir que hará una persona si vemos que incentivos tiene al tomar una decisión u otra. En una serie que me gusta de detectives siempre surge la pregunta para encontrar al culpable "¿Quién se beneficiaría más con la muerte de la víctima?".

Solo basta preguntarse donde está el incentivo mayor ante la toma de decisiones, donde ganaría más, que evitaría algo de dolor o esfuerzo, a veces contra toda razón lógica. La pregunta pertinente es (y aquí sale mi yo marketero): ¿Cómo genero incentivos para que otros hagan lo que quiero que hagan?

martes, septiembre 21, 2021

Desentrañando el Código

Acabo de comprar un libro titulado: "Cracking the Learning Code", una publicación producto de 30 años de investigación para descubrir el "código" del aprendizaje que tenemos. Y el desentrañar este código puede permitir un aprendizaje acelerado.

Esto me hizo recordar cuando estudiaba programación y finalmente tenía que aprender el código para poder crear desde páginas web, dibujar líneas en la pantalla o un juego como el Dr. Mario. Saber el código te permitía crear todo lo que se pudiera imaginar (en la potencia de programación de esa época).

La base de todo esta en "código" desde la estructura básica de todos los seres, el código genético determina todas tus características, color de ojos, piel, lunares, propensión a ciertas enfermedades o comportamientos, entre otros. Entonces entender cada código, que está en la misma base de la naturaleza, nos permite crear, modificar, acelerar o terminar cualquier proceso que dependa de ese código.

Muchas veces queremos entender las consecuencias de todo lo que vemos, antes de entender las causas, lo que nos lleva continuamente a tener los mismos resultados y a repetir comportamientos y patrones de lo que ya conocemos, porque ver la superficie o jugar Dr. Mario es lo más simple de hacer.

¿Por qué no tratar de desentrañar el "código" de aquello en lo que queremos obtener grandes resultados? Estudiar el proceso de tu elección, poder entender como funciona por dentro es lo que te llevará inexorablemente a lograr tus objetivos. ¿Cuál es el código que te interesa?

martes, septiembre 14, 2021

Muéstrame la publicidad que ves y te diré quien eres

Tenemos en nuestra mano un dispositivo "inteligente", en realidad no es que sea inteligente, lo que pasa es que recopila muchos en datos, "sabe" cuantas veces lo desbloqueas, miras la pantalla, que aplicaciones abres, cuanto tiempo utilizas cada una de ellas, donde estás, cuanto tiempo tardas en trasladarte, la música que escuchas, las noticias que lees, aquello que llama tu atención...

Y en esta era la atención lo es todo. Existe una crisis de atención generalizada, tanto es así que el retener tu mirada más de 3 segundos se considera un éxito publicitario. Es el porque plataformas de streaming (Netflix, Amazon Prime, HBO Max, y las que se vayan agregando) invierten millones de dólares en producir material videográfico para mantener tu atención por 1 hora o más en cada ocasión.

Lo interesante es que tu dispositivo te "conoce", al medir el tiempo que ocupas en cada ambiente que te da, noticias, vídeos, lo que buscas, quienes son tus amigos, a quienes le mandas mensaje, quienes están cerca físicamente de ti, por lo tanto esa información perteneciente a tu perfil es lo que eres.

Hay personas que se dedican única y exclusivamente a capitalizar tu atención en forma de anuncios, lo interesante es que esos anuncios solo generan rendimientos a quien los paga si te interesan, es decir, si eres dueño de un perro, soltero y con poco tiempo un anuncio del servicio de paseo de perros te puede interesar lo podrías comprar y el anunciante gana, sin embargo, si te ofrecen brasieres ergonómicos probablemente no te interesaría ese anunciante no ganaría.

Así que estás personas que conocen tu perfil mejor que nadie, usan la información que tu dispositivo recopila para poder llamar tu atención con aquello que te gusta y hacer que lo quieras comprar... y en la época de la inmediatez y la impaciencia y no darnos tiempo de conocer de verdad a alguien, quizá la mejor manera es aprovechar a los genios del marketing, al conocimiento tuyo que posee tu dispositivo y simplemente ver que publicidad te aparece para poder hacerte una "oferta".