Todos tenemos un poder super especial, importante y que nos permite lograr lo que sea que queramos, sin embargo, el problema es que no lo usamos a su máxima potencia y es el poder de decidir. Todo el tiempo nos encontramos ante oportunidades y circunstancias que exigen de nosotros tomar una decisión, desde las más simples como elegir que ropa usar hasta las más complejas como con quien compartir nuestra vida.
Yo digo que el futuro es muy simple de predecir porque la vida no es más que una concatenación de momentos para decidir, entonces si hacemos el ejercicio de ver que decisión tomaríamos hacia adelante y la tomamos de antemano estamos viendo el futuro, o más bien, creando el futuro con lo cual no debería de generarnos ansiedad.
Nuestra vida se construye de las decisiones que tomamos y entre mejor sean esas decisiones nuestra vida tendrá mayor calidad, el problema es que a veces decidimos que alguien más tome las decisiones por nosotros, mi ejemplo favorito, cuando decidimos vender nuestro tiempo por dinero y el jefe que viene con eso nos dicta a que hora levantarnos, como vestirnos, donde trabajar, a que hora comer, cuando poder tomar vacaciones, etc. Ahí es cuando delegamos nuestro poder de elección y claro el futuro se vuelve incierto porque ya no depende de nosotros sino de alguien más.
La reflexión puede ser fuerte, sin embargo, es constructiva ya que nos otorga la perspectiva adecuada acerca de como queremos que sea nuestra vida, finalmente es eso nuestra, y podemos decidir que sea tal cual la queramos, no digo que sea fácil construir la vida de nuestros sueños, lo que sí sé de seguro es que inicia con una decisión.
P.D. Hablando de como tomar decisiones, tengo una clase en mi canal de YouTube que habla justo de ello, así que prepara tu bebida favorita (como si fueras a ver un episodio de tu serie favorita) y disfrútala aquí!
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