viernes, diciembre 16, 2022

De nuestro viaje juntos o separados

He estado hablando mucho últimamente del amor, de esa fuerza extraordinaria del universo que puede elevarnos a lo más alto y sumergirnos a lo más profundo. Tan incomprensible, tan arrebatador, tan idílico y al mismo tiempo tan terrible. Y entonces vi dos historias tan distintas pero tan similares.

Imagínate que conoces al amor de tu vida, un encuentro casual y fortuito, un evento donde te invitaron de rebote, intercambiaron una charla, hasta números pero no se volvieron a hablar. Pero el amigo de tu amigo, un autor poderoso, en un evento meses después no sabía quien podría ayudarle y pidió ayuda y tu amigo pensó en ti, colaboraron ese día juntos y el reencuentro con el amor de tu vida sucedió, ahora si fue la chispa que encendió en ambos lo que podría empezar casi ahí mismo como su "vivieron felices para siempre". 

Aunque estás listo para entregarte para amar sin condiciones y ese ser es justo lo que habías estado buscando, la otra persona no está pasando por su mejor momento, y además está a punto de enfrascarse en una relación amorosa que podría funcionar, o no.

Sin embargo, algo los une, el travieso destino busca que compartan espacio físico, proyectos, hasta metas en común. Y cada vez que miras sus ojos descubres la profundidad del universo y sabes que de ser pareja, de estar verdaderamente juntos, podrían escalar la cima más alta en tiempo récord.

Sabes que con alguien más posiblemente podría sufrir, tener la relación que no busca, tú lo tienes todo para ser la pareja de sus sueños, si tan solo lo viera y quizá lo ve, solo que la inercia está impulsando en otra dirección. Y transcurre el tiempo, decide por esa relación ajena y te duele que no te haya elegido, y sufres en silencio, quizá hasta a su lado, y no quieres saber nada, al mismo tiempo quisieras saber todo, se vuelve una lucha contra ti mismo.

Y siguen los proyectos, cada vez las cosas pintan mejor y pasan los meses y a pesar de tus éxitos y de que te vuelves mucho más codiciado, atractivo, abundante, sientes que te falta esa conexión con el amor de tu vida y ves sus subidas y bajadas porque por alguna extraña razón no está contigo, porque su ceguera los aleja, porque busca en otras partes lo que ya podría tener contigo y hasta más.

Transcurre inevitable el tiempo y aunque los segundos pesan años, pasan eternidades, y de pronto se vuelven a encontrar. No estás de acuerdo en que seas el tercero o el cuarto en la fila de sus amoríos, que nada te garantiza que se quedará contigo, que si fuiste una opción podrían haber más. Has visto como ha crecido, como a través de los golpes que se buscó ha evolucionado, como ahora su vida es más estable y más firme, ha aprendido y ahora podría ofrecerte lo que siempre has buscado. En un último salto de fe, apostando tu sufrido corazón aceptas... y aunque tardó la aventura exquisita, y terrible a veces también, de su amor deja una huella imborrable... han envejecido juntos, pronto habrá que partir, después de tantas décadas a su lado, ni siquiera te acuerdas de todos esos que fueron antes de ti, porque una vez que estuvo contigo crearon una nueva historia, la historia de sus vidas, la única historia.

En un universo paralelo, paradójicamente igual a este...

Ese día que te reencontrarías con el amor de tu vida colaborando con ese poderoso escritor, este encontró a alguien que le ayudara y no le dijo a su amigo, que no pensó en ti y pues siguió tu rutina como hasta ese momento.

Seguiste con tus proyectos y claro buscando, aunque dices que sin buscar, pero luego si, el amor, en tus círculos sociales, en tus aplicaciones de citas, dejando que algunos de tus amigos te presentaran posibles personas de tu agrado. Pero como que la vida nomás no le atinaba a la correcta y entre ilusiones que resultaron vanas, encuentros físicos poco satisfactorios, fuiste avanzando, tropezando y volviendo a avanzar.

Tu novela publicada, tener proximidad con empresarios millonarios, tú y tu inseparable amigo haciendo muchos proyectos en común, la vida te empezó a sonreír, el dinero comenzó a llegar a montones, y hasta compraron esa casa para estar como en "Friends" (serie fundamental de la cultura pop de los 90's). Aunque todavía, a pesar del éxito, de estar estable financieramente, de ver nacer tantos proyectos, sentías que te hacía falta esa conexión. Hasta cuando iba a llegar la persona que viera todo lo maravilloso que eres, hasta cuando dejarían de asustarse las personas con tu autenticidad, claridad y decisión.

Un día, en tu impaciencia declaras que parece que el amor de verdad no se hizo para ti, ya tantos intentos fallidos, tanto dolor, tanto proteger a tu sufrido corazón, ya no te mereces sufrir más, puede ser que haya personas que simplemente en el terreno afectivo de pareja tengan que estar solas... y entonces se vuelven a encontrar, en una celebración de tu amigo y su amigo el escritor, ahí está el amor de tu vida, se saludan y se acuerdan de su primer encuentro, ambos solteros, resulta que están en la misma sintonía, que les han pasado las mismas decepciones amorosas y en un acto inusitado, todo por culpa de los neurotransmisores del amor, se declaran... aceptas, sin querer la aventura exquisita, y terrible a veces también, de su amor comienza para dejar una huella imborrable... han envejecido juntos, pronto habrá que partir, después de tantas décadas a su lado, ni siquiera te acuerdas de todos esos que fueron antes de ti, porque una vez que estuvo contigo crearon una nueva historia, la historia de sus vidas, la única historia.

1 comentario:

Denisse Rendón dijo...

Gracias por redactar este escrito tan lindo para mí.