lunes, noviembre 28, 2022

Hablando de nuestra experiencia compartida

Ayer tuvimos un lindo evento en casa y como en cada evento hay historias que son el centro de atención. En una de esas historias, con la que se cerró el evento, mi preciosa roomie hizo el comentario de que yo  me doy a querer siempre. Normalmente cuando alguien llega a conocerme al final me trata super bien y guarda un lindo recuerdo de mí, al parecer soy fácil de querer.

Pero ¿Cuál es el secreto de darse a querer? ¿Cómo lograr que las demás personas, en su mayoría, nos traten bien y quieran pasar más tiempo con nosotros? A pesar de que cada uno de nosotros es único, tiene su propia historia de vida y experiencias sin igual, todos en el fondo somos iguales. Compartimos esta experiencia llamada vida como seres humanos y experimentamos las mismas emociones en algún punto de nuestra historia.

Hay dos verdades innegables. Una de ellas es, que lo que sea por lo que estemos pasando o sintiendo, especialmente cuando atravesamos dificultades, alguien más también lo ha experimentado y nos puede ayudar o consolar, porque la vida nos pasa a todos, y no estamos solos. La segunda es que todos queremos ser bien tratados, ser vistos, que nos hagan sentir importantes, que se preocupen por nosotros.

Por lo tanto, el secreto de ser querido es simple, tratar a los demás como nos gustaría ser tratados, hace muchos años y no sé si fue por intuición o simple sentido común, me fijo en las personas alrededor mío, me acuerdo de su nombre, pregunto y escucho con atención y siempre (o al menos el 90% del tiempo) tengo una gran sonrisa para los demás, recuerdo cuando la subdirectora de la secundaria mencionó eso, que lo primero que recordaba al oír mi nombre era mi gran sonrisa.

Es tan simple y a veces algunas personas lo olvidan, solo hay que ser humanos, es gratis sonreír, es gratis dar la mano a otra persona, preguntarle y escucharla, la recompensa es un trato amable en cambio, y cariño por parte de los otros, creo que es el mejor esfuerzo que uno puede hacer, y vamos tampoco es nada difícil, así que depende de ti ¿Cuánto quieres que los otros te quieran?

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