lunes, octubre 12, 2020

Y es el día en que te conviertes en todo aquello que dijiste que ibas a destruir

Siempre he tenido un dilema sumamente interesante acerca de reglas rígidas, esquemas cuadrados, los conceptos de vigilancia y cumplimiento... por un lado soy ingeniero y el pensamiento estructurado se me da... por otro lado soy escritor, alma libre, ciudadano del mundo, disruptivo y despreocupado... y sí de acuerdo a la teoría de las dominancias cerebrales y tipos de personalidad tengo la combinación más extraña de todas...

Entonces, ven como de pronto me disperso, no me estén distrayendo... un día le dije a uno de mis jefes de ese entonces que su petición de reportar horas y actividades y estar a cada rato con juntas (aburridas e interminables) era solo una pérdida de tiempo y que fomentar un ambiente más relajado podría generar colaboradores más felices y más motivados y que aumentaría de esa forma la productividad.

Disculpen era mucho más joven, a pesar de mi rebelión de esa vez y que al final siempre tiendo a hacer lo que quiero (siempre aunque a veces si quiera seguir instrucciones y ordenarme por el bien mayor), esta vez quiero modificar mi forma de ver las cosas a ese respecto.

En mi rol de asesor y líder de estrategia digital para una empresa mediana, de pronto pensé: se requiere una reunión semanal con el personal clave o entre departamentos, podríamos generar nuevos formatos de "rendición de cuentas" para estar todos en el mismo canal. Jajaja justo aquello que dije que no servía para nada, resulta que si es una buena forma de aumentar la productividad del equipo...

Mi alma libre, encasillada, aun feliz, sentimientos encontrados, al final lo importante es ser flexibles dentro de un marco adecuado de acción, limitados en cuanto a la forma pero creativos en cuanto al fondo, esas extrañas combinaciones de personalidad que casi me llevan a la locura...

...aunque a veces solo enloquezca por aquí.

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